Desde los 10 meses a los 5 años, en los respectivos niveles, nuestros niños tienen la oportunidad de recibir una variada gama de propuestas y posibilidades enmarcadas en sus propios intereses, atendiendo los ritmos personales y promoviendo la interacción con sus pares, aspecto esencial de la sociabilización.
La propuesta curricular de la Escuela Integral atiende las diferentes áreas programáticas en español, en educación judía, en inglés sobre la base de una acción pedagógica de calidad, acompañada de variados e innovadores proyectos sustentados en valores, desarrollando habilidades y competencias para el futuro.
Como escuela judía orientamos nuestro accionar en acercar los elementos necesarios para que cada uno vaya construyendo su identidad como persona y como judío. Nos ocupamos de transmitir al niño de una manera natural y motivadora el legado de nuestras tradiciones, de la historia del Pueblo Judío, el Shabat, las festividades, el idioma hebreo, la música, las danzas israelíes, el vínculo con Israel.
Nivel | Entrada | Salida |
---|---|---|
N1 | 9 | 12.25 |
N2 | 9 | 12.30 |
N3 | 8.45 | 12.30 |
Gan Friends | 15.30 | |
N4 | 8.30 | 15.30 |
N5 | 8.30 | 16 |
Gan Kef | 13 | 16 |
Mtra. Patricia Chrempacz
Lic. Victoria Soria
Fabiana Gelfón
Edificio Gan – Maeso 2848
El PEP (Programa de la Escuela Primaria) ofrece un marco curricular transdisciplinario y basado en la indagación el cual se desarrolla en base a la comprensión conceptual. Este enfoque educativo se centra en el alumno y está dirigido a niños y niñas de edades comprendidas entre los 3 y los 12 años.
La Escuela Integral es un colegio de categoría solicitante* para el programa del PEP y desea obtener la autorización para ser un Colegio del Mundo del IB. Estos son colegios que comparten una filosofía común: un compromiso con una educación internacional rigurosa y de calidad que la Escuela Integral considera que es importante para los alumnos.
El desarrollo del lenguaje se estimula por medio de una sensibilidad especial hacia las intenciones comunicativas del niño, promoviendo los mensajes referenciales, articulando las palabras con claridad y utilizando estructuras sintácticas adecuadas. Esto dentro de un ambiente afectivamente positivo que favorezca la comunicación.
Hablar y escuchar al niño favorece su capacidad comunicativa. En la medida que aprende a usar las palabras, desarrolla conceptos e ideas respecto a los acontecimientos, lo que le ayudará a entender y sistematizar el mundo que lo rodea. El objetivo en el Gan, es ampliar la competencia comunicativa, buscando afianzar el vocabulario ya conocido e introducirlo en nuevos vocablos acordes a su edad, no solo en la lengua materna sino también en otras lenguas como el hebreo y el inglés.
Será a través de una metodología natural y lúdica en los diferentes rincones de la sala, con multiplicidad de elementos lo que promoverá el juego simbólico y con él la espontaneidad del lenguaje. Conversaciones, diálogos, monólogos, lenguaje gestual, juegos sonoros, de asociación, con variación de volumen y tonalidad, cuentos, rimas, canciones, etc. constituyen algunas de las estrategias metodológicas en todos los idiomas ante los cuales está expuesto el niño.
El proceso de aprendizaje de los idiomas comienza prácticamente desde el inicio del niño en el Gan. El objetivo principal es generar la vivencia del idioma, con sus diferentes sonidos y expresiones.
En este contexto, la adquisición y producción de la lengua se realiza a través del juego, por lo que se prioriza que el niño disfrute, cante y juegue mientras aprende.
“La educación es lo más cercano a la magia en el mundo. Nada puede transformar la vida de una persona como la educación. Insufla confianza y regala a las personas una voz. Además de sus evidentes beneficios para una vida más plena y mejor, la educación puede contribuir a la mejora de la sociedad en su conjunto; una sociedad en la que la gente sea consciente de sus derechos y deberes”
(Nivasini, estudiante de secundaria de India y participante en la plataforma online /The World we Want).
Tu existencia acaba de transformarse por completo. Tu bebé tendrá la capacidad de hacerte la persona más feliz del universo y, al mismo tiempo, te hará responsable de cuidarla, amarla y educarla.
¿Para qué educamos?
Para lograr que nuestros hijos sean responsables por sus propias vidas.
Para empezar, educamos para la libertad. Para que durante la vida adulta no deban depender de nosotros ni de nadie, sino que puedan hacerse cargo de sí mismos. Cada niño debe crecer con la certeza de que es el arquitecto y constructor de su vida, y que por lo tanto cada acto, tiene consecuencias.
Para que sean autosuficientes. Educamos para que puedan autosustentarse con el nivel de bienestar con el que se sientan cómodos, pero sabiendo que ni bienes materiales ni placer, son sinónimos de felicidad.
Educamos para que desarrollen el pensamiento crítico, el sentido común, la empatía y la resiliencia. Y sobre todo, para que potencien su fuerza de voluntad. Porque estas habilidades, más que el conocimiento de historia o matemática, son las que le permitirán descubrir sus intereses e ir detrás de sus sueños.
Para que se conviertan en buenos ciudadanos e incorporen valores morales. Los seres humanos somos seres interdependientes. El bienestar de uno, depende de todos. Si cada persona asume sus derechos ciudadanos pero también sus deberes, el mundo será un lugar mejor. Educar es enseñar el sentido de justicia, la tolerancia, la cooperación, la aceptación de la diversidad, la igualdad de género. Es enseñarles a valorar a la familia, los vecinos, los amigos, el diálogo, los momentos de encuentro.
Para que incorporen límites, y desarrollen hábitos de higiene, de salud y de alimentación. Los niños nacen pensando que el mundo les pertenece y que pueden hacer lo que quieren y cuando quieren. Los padres tenemos el deber de mostrarles los límites tantas veces como sea necesario hasta que naturalmente formen parte de sus vidas.
Para que puedan manejar sus emociones. Porque esto es lo que les permitirá valerse por sí mismos y encontrar bienestar cada día.
Para que valoren el milagro de sus propias vidas, descubran sus talentos y persigan sus sueños. Nada hace tan feliz a un ser humano como hacer aquello para lo que siente que llegó al mundo. Educamos para que nuestros hijos puedan estar satisfechos con lo que tienen, sin dejar de luchar por lo que quieren.
¿Y eso cómo se hace?
Por supuesto, no hay una única respuesta. Hay una cadena milenaria de sabiduría y un desafío gigante: enfrentar cada una de tus certezas con la realidad y circunstancias que se imponen.
Para acompañarte en ese recorrido, elegimos algunas ideas que hoy tal vez sientas lejanas, pero seguro que en un abrir y cerrar de ojos van a estar burbujeando en tu interior. Porque esa misma manito que hoy te aprieta con fuerza, mañana empezará a volar.
Tú no conocerás el destino. No sabrás la altitud. No podrás elegir la compañía. Porque de eso se trata ser padre y madre. De dar lo mejor de uno para transformar a otro. Transformar a este bebé que hoy llena tu alma con su mirada, en una persona independiente y responsable de sí misma.
El trabajo no es que sea lo que tú quieres que sea y mucho menos lo que no pudiste ser. Es generar el ambiente nutritivo para que pueda ser la mejor versión de sí mismo. Por eso, educar bien no es dar a los niños todo lo que piden. No es evitarles toda frustración y sufrimiento. Ni impedir que lloren, se caigan o se lastimen. Es ayudarlos a levantarse una y mil veces. Potenciar sus talentos. Y sobre todo, ayudarles a forjar una identidad de la que puedan estar orgullosos. ¿Lo hacemos juntos?
¡Mazal Tov!
Desarrollo de contenidos: Lic. Raquel Oberlander.
Aprender jugando
Queremos acompañar al niño en sus primeros años de vida con un proyecto educativo que responda a sus necesidades y que, desde pequeño, estimule su desarrollo integral en todas las áreas. Por tanto, en el horario vespertino brindamos una propuesta flexible, rica y variada que incluye Español, Educación Judía e Inglés.
En la tarde, cada familia puede elegir la cantidad de días que entienda son los apropiados para su hijo. Puede optar por la propuesta de lunes a viernes o ajustar la cantidad de días según sus necesidades, acotándola a dos o tres veces por semana.
Horario vespertino de 13 a 16 hs.
Dirigido a niños de 10 meses a 3 años.
Modalidad de asistencia: dos, tres o todos los días de la semana.
Propuesta Inglés Nivel 4 y 5
Los primeros años del niño facilitan el desarrollo de aprendizajes más significativos, en especial las habilidades comunicativas. En Nivel 4 y 5, un turno en su totalidad se destina a la enseñanza del idioma inglés. Los alumnos tienen mayor contacto con esta lengua, a través de herramientas comunicacionales fundamentales para el futuro.